El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, anunció la suspensión de las celebraciones del 15 de septiembre en Culiacán, debido a la creciente violencia que afecta a diversas regiones del estado, incluidas Elota, Cosalá y San Ignacio. Los eventos conmemorativos se limitarán a un acto protocolario en el Palacio de Gobierno, sin público ni invitados, para honrar a los héroes de la Independencia.
Durante los últimos días, grupos criminales han causado caos en la región, bloqueando carreteras y quemando vehículos, particularmente en los alrededores de Culiacán. “Hemos decidido suspender los festejos del Grito de Independencia. Solo realizaremos el protocolo con la escolta, la banda de guerra y mi gabinete. No habrá invitados, pero es importante rendir homenaje a la patria”, afirmó Rocha Moya a través de un video publicado en su cuenta oficial de X (anteriormente Twitter).
El evento musical, que incluía una presentación de Los Aguilar —Ángela, Pepe y Leonardo—, también fue cancelado. Además, el gobernador confirmó la suspensión de clases en todos los niveles educativos en los municipios afectados por la violencia.
Ola de violencia y respuesta de las autoridades
El pasado jueves 12 de septiembre, la situación de violencia se intensificó en Culiacán, con reportes de enfrentamientos entre civiles armados y fuerzas militares en la zona norte de la ciudad. Vehículos fueron incendiados en áreas como Miguel Hidalgo y Barranco, y desde el lunes se han registrado bloqueos, balaceras y enfrentamientos entre grupos armados.
Rocha Moya también hizo un llamado a los comerciantes de Culiacán para que mantuvieran abiertas sus actividades, subrayando la importancia de que la ciudad continúe su vida económica. “Vale la pena que abran sus negocios, que den vida al trabajo regular. La actividad económica debe continuar, a pesar de la situación”, señaló el gobernador.
Sin embargo, la incertidumbre persiste en la capital sinaloense. Las calles están parcialmente vacías, y muchos establecimientos, como restaurantes y cines, han reducido sus horarios o cerrado sus puertas por temor a la violencia.
El impacto de la violencia previo a las Fiestas Patrias
Desde el 9 de septiembre, Sinaloa ha vivido una serie de enfrentamientos que han generado pánico en diversas zonas. Uno de los incidentes más graves ocurrió en La Campiña, en Culiacán, donde civiles armados se enfrentaron con las fuerzas del orden, lo que provocó un operativo que resultó en la recuperación de dos vehículos abandonados, pero sin detenciones.
Los hechos violentos han continuado a lo largo de la semana. El secretario de Seguridad Pública del Estado, Gerardo Mérida Sánchez, informó sobre tres homicidios el martes por la noche en Culiacán, dos en la colonia Miguel Hidalgo y otro en la colonia 16 de Septiembre. Además, la Fiscalía General del Estado ha recibido múltiples denuncias por robo de vehículos y secuestros, con un saldo de al menos nueve personas asesinadas hasta el 11 de septiembre.
Suspensión de festejos en más municipios y alerta en Durango
Debido a la ola de violencia, otros municipios como Ahome, Navolato y Guasave también han decidido cancelar las festividades patrias, limitándose a actos protocolarios con autoridades locales. En solidaridad con el gobierno estatal, el alcalde de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, subrayó la necesidad de priorizar la seguridad y enviar un mensaje de unidad en tiempos difíciles.
El gobernador de Durango, Esteban Villegas Villarreal, expresó su preocupación por el impacto de la violencia en Sinaloa, especialmente en municipios fronterizos como Tamazula y San Dimas, donde se han reforzado las medidas de seguridad para evitar la propagación de la violencia hacia su estado.
Villegas informó que han desplegado elementos adicionales de la Guardia Nacional y el Ejército en estas zonas limítrofes, especialmente en el Triángulo Dorado, área conocida por su actividad criminal relacionada con el narcotráfico. El operativo también busca contener la violencia derivada de los intentos por capturar a El Guano, hermano de El Chapo Guzmán.
La violencia en Sinaloa mantiene en vilo a la población y ha obligado a las autoridades a implementar medidas extraordinarias en vísperas de las Fiestas Patrias, un evento que tradicionalmente une a la nación en celebración, pero que este año estará marcado por el miedo y la incertidumbre.
